La versatilidad de una titulación: Industrias Agroalimentarias
Me gustaría hablar de la versatilidad de la titulación que se imparte en mi centro, y que muchas veces los alumnos desconocen. Esta titulación es la Ingeniería en Industrias Agroalimentarias. Esta versatilidad de la que vamos a hablar también la tienen otras titulaciones, como Ciencia y Tecnología de los Alimentos, pero en un grado ligeramente menor.
Existen titulaciones que dan muchos conocimientos más básicos, sin que se observen las utilidades de estos conocimientos, o al menos no en tanta profundidad como en otras. Todos podemos tener alguna en mente. Que no se muestren las utilidades no quiere decir que no las tengan, pero en algunos casos falta formación para ligar estos conocimientos con futuros puestos de trabajo. Así muchos nos imaginamos a matemáticos o biólogos como profesores de instituto, cuando la realidad es que existen multitud de puestos de trabajos para los que salen capacitados. Aunque quizás les falte una formación puente, que pueden dar las empresas. En otros casos las titulaciones son muy específicas, y realmente van construyendo un cuerpo de conocimiento que va creciendo con los años. Pero en estas titulaciones los alumnos pueden tener poca versatilidad para su futuro. Sin embargo, en la titulación de Industrias Agroalimentarias los alumnos adquieren muchos conocimientos ligados a la realidad profesional. Lamentablemente muchos de estos conocimientos no están conectados directamente, por lo que los alumnos no profundizan en ellos y nunca saben lo mismo de químicas que un químico, de física que un físico, de construcciones que un ingeniero de caminos, etc. Por tanto, en contra de esta titulación esta la falta de concreción. Pero a su favor esta la multitud de oportunidades que tienen los alumnos para que encuentren su pasión, y el obtener (si los alumnos son buenos) una cabeza bien amueblada y la capacidad de interrelacionar muchos conceptos, y pensar.
Lamentable alguna escuela ha identificado la palabra ingeniería de una forma muy estrecha, obligando a los alumnos a realizar trabajos estrictamente ingenieriles. Pero la realidad nos muestras que nuestros alumnos están muy demandados para multitud de puestos de trabajo, algo que demuestra la diversidad de los temas en las prácticas en empresa, y de las salidas profesionales que conocemos. Yo creo que esta diversidad es una gran ventaja de la titulación y debe potenciarse, permitiendo a los alumnos que potencien su formación en aquello que realmente les encante y a lo que quiera dedicarse en un futuro. Esto puede tener el riesgo de que algunos alumnos pueden elegir los caminos más fáciles, y no aquellos que más les interesen o gusten, o que le abran las puertas a un mejor futuro profesional. También puede existir el riesgo de que algunos profesores intenten “aprovecharse” de los alumnos para que hagan trabajos que interesan más a los profesores que los alumnos. Pero estos riesgos también se pueden dar en trabajos más específicos y orientados. Y las ventajas de tener alumnos motivados, desarrollando habilidades que les satisfacen, son infinitamente superiores a esos riesgos.
Vamos a hablar un poco de los posibles trabajos en los que nuestros alumnos pueden desarrollar su carrera profesional. Uno de los trabajos obvios de una titulación de ingeniería es el trabajo en empresas de proyectos. Como todos los trabajos de los que vamos a hablar puede ser realmente bonito y gratificante, pero en las escuelas no vemos que haya una gran oferta de prácticas en empresa en ese tipo de tareas. Eso puede indicar que no hay muchas posibilidades laborales en esa temática. Pero esto nunca se puede interpretar como que no hay posibilidades, solo digo que puede haber menos, pero los alumnos motivados y apasionados por estos temas pueden encontrar su hueco y su futuro, tanto en este campo como en otros de los que hablaremos. Como ingenieros también pueden trabajar en empresas de maquinaria, instalaciones, construcciones, consultoría, e incluso programación. Quizás hay titulaciones más preparadas para estos trabajos, como ingeniería industrial, de caminos, o informática, pero en ciertos puestos se prefiere a alumnos que tengan una visión más horizontal, o transversal, y en otros solo se busca alguien con formación en ingeniería, y ya terminarán de formarse en la empresa.
Otro de los trabajos más demandados entre nuestros alumnos es el relacionado con la calidad. Hace unos años este solía estar relacionado con analíticas en laboratorios. Y muchas empresas preferían a químicos u otros titulados. Esto dependía mucho de las analíticas a realizar. Pero nuestros alumnos eran muy demandados porque además de en las analíticas, tenían formación en cómo estas afectaban a los procesos, y podían interactuar mejor con otros departamentos. Hoy en día los trabajos en calidad suelen estar más relacionados con la gestión de la calidad y con la implantación o mantenimiento de sistemas como el APPCC, normas ISO, BRC, IFS, etc. En estos casos la formación sobre estos temas, pero especialmente sobre procesos y otros aspectos, hace que nuestros alumnos puedan ser tan adecuados como el que más. De hecho, estos trabajos son unos de los más demandados para las prácticas en empresa. Los alumnos que sientan atracción por estos temas están de enhorabuena, ya que hay muchas oportunidades laborales y además suelen ser muy transversales. Es decir, lo que se aprenda en una empresa láctea sobre gestión de calidad es aplicable a una cárnica, de cereales o de verduras. Y esto no siempre pasa, como veremos.
Uno de los trabajos para los que veo más capacitados a nuestros alumnos es el relacionado con la producción. Tanto jefes de turno como de línea y otros similares. Tiene formación sobre los procesos productivos, pero a diferencia de otras titulaciones, están más formados sobre la maquinaria y las instalaciones, y cada vez más sobre la organización industrial. Lamentablemente las prácticas en empresa en estos puestos no abundan, ya que para las empresas es complicado encajar a los alumnos en puestos de este tipo. Pero las colocaciones sí que son abundantes una vez obtenida la titulación. Y cada vez son más abundantes las prácticas relacionadas con la organización industrial en temas como Lean Manufacturing o similares.
Otra de las posibilidades se centra en las labores de I+D. Es un trabajo para el que suele ser posible encontrar prácticas. Para un buen desempeño en estos casos sí que es recomendable una mayor formación universitaria, a través de un master o quizás un doctorado, pero siempre orientándolos muy bien al trabajo en empresa, y a la temática elegida por el alumno. Para mi es uno de los trabajos más gratificantes, pero en muchas empresas no se valora demasiado (al menos los sueldos no están acordes con una alta valoración) y es un trabajo que te suele encasillar demasiado. Así si te especializas en productos cárnicas cocidos, esa experiencia no suele ser muy útil para el desarrollo de productos de panadería, por ejemplo.
Obviamente también se puede desarrollar una carrera como técnico comercial, muy valorados si el alumno tiene buenas aptitudes para la venta. Pero no es un simple vendedor, es alguien que además aporta un conocimiento profundo y capacidad de asesoramiento a los clientes. Y, aunque menos conocidos, nuestros alumnos también pueden desempeñar puestos en departamentos de compras de materias primas, ya que tienen conocimientos tanto de los procesos de producción como de la producción primaria, tanto vegetal como animal.
No nos vamos a alargar más, pero también existe la posibilidad de ser profesor, realizar distintos tipos de oposiciones, trabajar en empresas de consultoría en distintos temas, centros tecnológicos, etc. Ya iremos hablando de todo ello.
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